Como muchos otros grandes autores, el sinaloense Élmer Mendoza no siempre se dedicó a la escritura.

Hasta poco antes de cumplir 30 años, este culichi de nacimiento trabajaba como ingeniero en una fábrica de RCA, empleo que abandonó con el objetivo de convertirse en escritor y conquistar el mundo de las letras.

Cuenta la leyenda que Mendoza llegó un día a su casa, después de una larga jornada laboral en la fábrica, y en lugar de irse a dormir agarró una libreta y una pluma, comenzó a escribir y no se detuvo nunca más.

Su camino no fue fácil. Comenzó publicando en diferentes suplementos locales, editoriales independientes, y aunque las cosas no siempre fueron fáciles para él, trabajó día y noche hasta que su persistencia rindió frutos.

Fue en 1999 cuando el manuscrito de Un asesino solitario llegó a manos del jurado de un concurso que, aunque no le dio la victoria, sí le abrió las puertas para publicar esta novela en editorial Tusquets.

A partir de ahí, Élmer Mendoza ha publicado en esta misma editorial las novelas El amante de Janis Joplin, Efecto Tequila, Cóbraselo caro, Balas de plata, La prueba de ácido, Nombre de perro; y los libros de cuentos Trancapalanca y Firmado con un klínex.

Más recientemente, publicó la novela juvenil El misterio de la orquídea calavera, con la que inaugura su serie de El Capi Garay.

Si no la has leído o no sabes de qué trata, checa este book trailer en el que se cuenta, a grades rasgos, de qué va su historia.

El misterio de la orquídea calavera ya está disponible en librerías y tiendas en línea.