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En el buró de Norma Lazo

Norma Lazo es autora de Lo imperdonable. Les presentamos las respuestas que nos dio para la sección En el buró de…

Norma Lazo participará en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara con una charla titulada De lo imperdonable del formol en un vestido de novia: las escritoras de Tusquets. Con ella estarán Carla Faesler y Socorro Venegas. El evento es el sábado 6 de diciembre a las 16hrs en el salón Alfredo R. Placencia, planta alta, de la Expo Guadalajara.

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NormaLAzo

¿Cuál ha sido el mejor libro que ha leído este año?

Este año ha sido de lectura compulsiva y no podría escoger solo uno: Dersú Uzala de Vladimir Arséniev, Campo de Guerra de Sergio González Rodríguez, Contingencia, ironía y solidaridad de Richard Rorty y El diablo me obligó de F. G. Haghenbeck.

Si tuviera que escoger a una o un novelista favorito, ¿cuál sería?

PhilipRoth.

¿Qué tipo de historias son las que le atrapan?

Lo que más me atrapa es el ensayo. Hablando de ficción me gustan las historias oscuras que reflejan cierta luminosidad y el estudio sobre el dolor humano.

¿En qué manera influyen en su vida los libros que lee?

No imagino otra vida que no sea leyendo y escribiendo. Y los libros que leo siempre están presentes en mi propia escritura.

¿Qué libro nos sorprendería encontrar junto a su cama?

En este momento está Por el territorio del Ussuri, las memorias de viaje del capitán Vladimir Arséniev. Hasta a mí me sorprende. Son las notas de un militar, cartógrafo y etnógrafo de la Rusia zarista.

¿Cuál ha sido el libro que más le ha marcado?

El corazón es un cazador solitario de Carson McCullers. Leí esa novela en la adolescencia y con ella decidí que sería escritora y que tenía que irme de mi puerto natal.

Su lugar favorito para leer es…

La cama.

¿Cuál es el primer libro que recuerda haber leído?

Creo que Leyendas de Gustavo Adolfo Bécquer. Las leí de niña y descubrí la emoción del miedo bueno —así le llamo— que provoca la lectura y el cine de género. No dormí sola por varias semanas.

¿Había libros en su casa cuando era niño?

No. Nadie leía en mi casa. En una mudanza a casa de mi abuela, quien tenía una pensión para hombres, descubrí una caja de libros de pura literatura de género de horror. Estaban destinados a la basura pero yo quise quedármelos. Allí empezó la pasión.

¿Tiene un héroe o personaje favorito de literatura infantil?

Empecé leyendo sin dirección así que esa parte, la de la literatura para niños, me la salté.

¿Cuál ha sido el mejor libro que le han regalado?

Me han regalado muchos, imposible recordarlos. El año pasado me regalaron Todo lo que muere de John Connolly y fue el mejor libro que me regalaron el año pasado.

¿Qué libros están en su buró en este momento?

Sobre el problema de la empatía de Edith Stein, Ética de la hospitalidad de Daniel Innerarity, Por el territorio del Ussuride Vladimir Arséniev y Las llaves de la ciudad de David Lida que, por cierto, estoy releyendo.

¿Qué libros adornan la mesa de su sala?

Solo tengo un libro en la mesa de centro. Una retrospectiva fotográfica de Diane Arbus.

¿Cuál fue el último libro que le hizo llorar?

El cerebro de mi hermano de Rafael Pérez Gay.

¿Cuál fue el último libro que le hizo reír?

Las llaves de la ciudad de David Lida.

¿Cuál fue el último libro que le hizo haber deseado ser usted quien lo escribió?

Tratado sobre la medusa de Pascal Quignard.

¿Cuál fue el último libro que abandonó sin terminar de leerlo?

22/11/63 de Stephen King.

¿A qué escritor, vivo o muerto, le gustaría conocer? ¿Qué le preguntaría?

A Carson McCullers. No le preguntaría nada, me sentaría a su lado dispuesta a escuchar cualquier cosa que quisiera decirme.

Su siguiente lectura será…

No lo sé. Eso aunque lo planee puede cambiar de un momento a otro, porque se da de la misma forma que se da la amistad. De manera inexplicable y pletórica de hospitalidad.