Todos contra uno: el juicio de Adolf Eichmann

Desde los albores de la historia, la humanidad ha presenciado la escena de un hombre solitario que se enfrenta a su propia destrucción, una destrucción encarnada por un tribunal que, a su vez, representa a la sociedad. Todos nosotros que, de una u otra manera, dudamos de nuestra propia muerte (es decir, de la realidad) nos encontramos en el juicio cara a cara con la existencia de esa cruda realidad.

A veces, un juicio resulta inolvidable por su significado simbólico y porque el acusado cuenta con nuestra más absoluta simpatía. Este es el caso del juicio de Sócrates, que se celebró en Atenas en el siglo V antes de Jesucristo. En ocasiones, un juicio cambia el rostro de la humanidad, como en el que se celebró contra Jesús, en Jerusalén, en torno al año treinta de nuestra era. Puesto que la condena del inocente era inherente a la tarea de cumplir las Escrituras, las posibles actitudes frente a este juicio superan la dimensión humana. A veces, un juicio se recuerda por haber sido un caso sumamente lastimero y sucio, como el proceso contra Juana de Arco, en la ciudad de Ruan, en 1431. En otras ocasiones, el juicio marca unos inmensos cambios políticos, como el proceso contra Luis XVI, en París, en 1793. En este caso se puede discrepar sobre de qué lado deben estar las simpatías. Sin embargo, en la historia del mundo, la humanidad no se había preparado nunca (tan unánimemente exenta de simpatía) para destruir a un sólo hombre como en el caso de Adolf Eichmann, en Jerusalén, en 1961.

Cabría preguntarse por qué no aparecen en esta lista los juicios de Núremberg pues, a fin de cuentas, allí se juzgó a personas que incluso eran culpables de forma más directa y en mayor grado que Eichmann. La respuesta podría ser que, en 1946, nadie quería oir hablar de la guerra: había que colgar cuanto antes a los canallas y pasar la página. Además, incluso entonces, algunos hechos resultaban apenas creíbles, como el terrible testimonio sobre las cámaras de gas ofrecido por un miembro de la SS, Kurt Gerstein (quien en 1942 transmitió esta información a Suecia y al Vaticano, aunque su acción fue infructuosa). En cambio, ahora, en 1961, la guerra está de moda: las novelas de guerra encabezan la lista de best sellers, los documentales bélicos llenan las salas de cine de todo el mundo, hay una nueva generación que quiere saber todo acerca de los motivos válidos o cuestionables. Sin embargo, la abrumadora atención que recibe el juicio a Eichmann no se puede explicar únicamente por la distancia que nos separa ahora de la guerra. La principal causa redica sin duda en el hecho de que, en Jerusalén, se presentará ante sus jueces un sólo hombre, mientras que en Núremberg era veinte. Aquello era un grupo frente a un grupo, algo muy distinto de todos contra uno.

Extracto de El juicio a Eichmann, de Harry Mulisch.

el juicio a eichmann

El juicio a Eichmann, de Harry Mulisch, está disponible en librerías y tiendas en línea bajo el sello Ariel.

El cuento de la semana: ‘Las ruinas circulares’, de Jorge Luis Borges

Bienvenidos a nuestra nueva sección: El cuento de la semana. Cada lunes publicaremos un relato corto que, por sus características literarias, merece ser leído por todos los visitantes de esta página.

jorge luis borges

Hoy comenzaremos con Las ruinas circulares, escrito por el  argentino Jorge Luis Borges e incluído en su libro Ficciones, de 1944.

¡Bienvenido!

Las ruinas circulares

Jorge Luis Borges

Nadie lo vio desembarcar en la unánime noche, nadie vio la canoa de bambú sumiéndose en el fango sagrado, pero a los pocos días nadie ignoraba que el hombre taciturno venía del Sur y que su patria era una de las infinitas aldeas que están aguas arriba, en el flanco violento de la montaña, donde el idioma zend no está contaminado de griego y donde es infrecuente la lepra. Lo cierto es que el hombre gris besó el fango, repechó la ribera sin apartar (probablemente, sin sentir) las cortaderas que le dilaceraban las carnes y se arrastró, mareado y ensangrentado, hasta el recinto circular que corona un tigre o caballo de piedra, que tuvo alguna vez el color del fuego y ahora el de la ceniza. Ese redondel es un templo que devoraron los incendios antiguos, que la selva palúdica ha profanado y cuyo dios no recibe honor de los hombres. El forastero se tendió bajo el pedestal. Lo despertó el sol alto. Comprobó sin asombro que las heridas habían cicatrizado; cerró los ojos pálidos y durmió, no por flaqueza de la carne sino por determinación de la voluntad. Sabía que ese templo era el lugar que requería su invencible propósito; sabía que los árboles incesantes no habían logrado estrangular, río abajo, las ruinas de otro templo propicio, también de dioses incendiados y muertos; sabía que su inmediata obligación era el sueño. Hacia la medianoche lo despertó el grito inconsolable de un pájaro. Rastros de pies descalzos, unos higos y un cántaro le advirtieron que los hombres de la región habían espiado con respeto su sueño y solicitaban su amparo o temían su magia. Sintió el frío del miedo y buscó en la muralla dilapidada un nicho sepulcral y se tapó con hojas desconocidas.

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Sue Grafton: ejecutora de ‘El Alfabeto del Crimen’

Sue Grafton es autora de un crimen sin precedentes: escribir 23 novelas de misterio basadas en las letras del alfabeto.

Desde A de Adulterio y B de Bestias, hasta V de Venganza y W de Wasted (todavía no publicada en español), esta escritora ha retratado el peligro y los misterios que se viven en la ciudad ficticia de Santa Bárbara.

Para que estés prevenido y andes con cuidado entre los misterios creados por esta mujer, aquí reproducimos su ficha criminal, que habla específicamente de su novela S de Silencio.

s Grafton

Caso: S de Silencio

Autor intelectual: Sue Grafton

Antecedentes: A de Adulterio, B de Bestias, C de Cadáver, D de Deuda… y una novela por letra (publicada en español) hasta R de Rebelde.

Cómplice: Kinsey Millhone.

Crimen: Una hija abandonada por su madre trata de esclarecer la verdad sobre esa mujer que desapareció treinta y cuatro años atrás dejando a sus espaldas sólo maliciosas conjeturas de vecinos sobre su escandalosa vida sentimental.

Testigos: The Wall Street Journal: «La complejidad de Millhone se refleja en cada uno de sus casos».

The Nw York Times Book Review: «El Alfabeto del Crimen de Sue Grafton ofrece un placer tan consistente que te obliga a preguntarte cuál es su secreto».

Veredicto: «La escritora de novela negra con más talento» (The Washington Post).

S de silencio 2

S de Silencio, de Sue Grafton, está disponible en librerías y tiendas en línea bajo el sello Tusquets.

Para leerte mejor: Mecanismos para la formación de lectores que escriban

La calidad de la educación y del desempeño laboral depende en enorme medida del dominio de la lengua. Escuchar, leer, hablar y escribir mejor permite pensar, saber, creer, descubrir, conocer, indagar, imaginar mejor. El dominio del idioma se fortalece con la lectura y la escritura, que empiezan con el amor a los libros, a otros impresos, a las opciones de imágenes y textos que ofrecen las nuevas tecnologías. La afición, la curiosidad, el interés por los textos y las imágenes pueden arraigarse en los niños antes de que aprendan a leer, e incluso antes de que aprendan a hablar.

No invertir en la formación de lectores que lean por gusto y sean capaces de servirse de la escritura es desperdiciar lo que el país ha invertido en la ampliación de la cobertura escolar, la alfabetización y la práctica de los otros usos de la lectura y la escritura.

Una consecuencia de la lectura por placer -de la nota roja y las reseñas de espectáculos de Lezama Lima y Sergio Pitol- es el adiestramiento para la comprensión: para la construcción de sentidos y significados. Eso la vuelve una actividad educativa y formativa irremplazable, vinculada a lo largo de la vida con múltiples formas y niveles de desarrollo personal y social. Una actividad que será más productiva mientras se realice con textos de mayor calidad.

Aunque sea, como diría Perogrullo, una actividad de la mayor utilidad, la lectura utilitaria no crea la afición a leer. Durante dieciocho años (1983-2001), mientras fue dirigida por la doctora Ana María Magaloni, la Red Nacional de Bibliotecas Públicas tuvo un crecimiento extraordinario, pues pasó de poco más de trescientas a poco más de seis mil, instaladas en ochenta y ocho por ciento de los municipios de la república.

Tuvo una innegable eficacia para contribuir a que el analfabetismo se redujera, pero se mantuvo enérgicamente orientada hacia la lectura útil y su capacidad para formar lectores fue virtualmente nula.

Los lectores se forman cuando descubren los placeres de la lectura; los placeres de los sentidos y placeres del intelecto. En ese momento ya no hacen falta otras razones: la recompensa mayor de leer es la lectura misma. Como escribió Alfonso Reyes en La experiencia literaria: «Sin cierto olvido de la utilidad, los libros no podrían ser apreciados».

Extracto de Para leerte mejor, de Felipe Garrido.

para leerte mejor

Para leerte mejor, de Felipe Garrido, está disponible en librerías y tiendas en línea bajo el sello Paidós.

15 tatuajes de máquinas de escribir que te darán inspiración

Aunque hoy en día no es tan frecuente que se utilicen las máquinas de escribir, estos artefactos pasarán a la historia como uno de los iconos y fetiches más emblemáticos de la literatura. Muchos de los grandes escritores de las generaciones pasadas escribieron sus cuentos, novelas y ensayos en estos aparatos, que con el ruido mecánico de sus teclas convirtieron el quehacer literario casi en un deporte: hace falta una increíble precisión para no equivocarse de tecla, y una extraordinaria fuerza en las manos para no cansarse durante los primeros quince minutos.

Las máquinas de escribir son, pues, un símbolo de creatividad. Una herramienta que les da a los escritores la fuerza necesaria para enfrentarse a la página en blanco.

En ese sentido, tener un tatuaje de máquina de escribir sería un recordatorio permanente de nuestra incesante búsqueda creativa, en cualquier cosa que hagamos.

Aquí te dejamos una selección de 15 tatuajes en forma de máquina de escribir, para que te inspires y te hagas el tuyo.

1. «Escribo porque hay una voz dentro de mí que no se queda quieta».

1

2. «Para mí, los únicos que existen son los locos».

3

3. «Un día a la vez».

5

4. Parece que esta máquina tiene un bigotito.

6

5. «Puede que nunca esté completo…».

7

6. Máquina de música.

10

7. Capítulo uno.11

8.Papel infinito.

12

9. Mi viejita querida.

13

10. S. R. H.

16

11. «Lo personal es político».

18

12. Escribir entre golondrinas.

19

13. «Escoge un sueño».

20

14. Un modelo más reciente.

23

15. Escribir es integrarse con la naturaleza.

24

 

¿Qué te parecieron? ¿Ta harías algún tatuaje de estos?

El libro que cambió mi vida: Carla Faesler

Carla Faesler es autora de Formol, una novela recientemente publicada por Tusquets que cuenta la historia de la familia Larca, en cuya biblioteca fue hallado un corazón humano en un frasco de formol. Este corazón perteneció al joven guerrero que fue sacrificado en el último ritual que se llevó a cabo en el Templo Mayor, en la época prehispánica de México.

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El próximo 29 de julio, Carla Faesler compartirá una mesa junto con Tomás Borges, Benito Taibo y Sergio Almazán, en la que discutirán sobre el libro que cambió sus vidas.

El evento se realizará en la librería Gandhi Mauricio Achar, ubicada en Miguel Ángel de Quevedo 121, colonia Guadalupe Chimalistac, en punto de las 19:00 horas.

Si quieres ver un adelanto del video que cambió la vida de Carla, te invitamos a ver este video.

Carla Faesler nació en la Ciudad de México en 1967. Es autora de los libros de poemas Catába­sis exvoto, Anábasis maqueta (Premio Nacional de Literatura Gilberto Owen en 2002), No tú sino la piedra y Ríos sagrados que la herejía navega. Par­te de su obra ha sido publicada en revistas nacio­nales e internacionales como Mandorla, Aufgabe y Cuadernos del Matemático, entre otras. Ha sido traducida a otros idiomas e incluida en antolo­gías estadounidenses, mexicanas y españolas. Es también autora de varios ensayos sobre artes vi­suales y sobre el quehacer interdisciplinario en la literatura. Desde hace varios años experimenta con diferentes formas de diálogo entre imagen y texto a través de fotopoemas y videopoemas que pueden verse en internet. Asimismo, ha mostrado su trabajo en varios fes­tivales internacionales de literatura y ha colaborado con artistas plásticos como Melanie Smith, Mariana Castillo Deball y Francis Alÿs. Actualmente, es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte. Formol (Tusquets, 2014) es su primera novela.

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Formol, de Carla Faesler, ya está disponible en librerías y tiendas en línea bajo el sello Tusquets.

El verano en que me enamoré

Llevábamos conduciendo como unos siete mil años, o al menos eso parecía. Mi hermano Steven conducía incluso más despacio que la abuela. Yo estaba sentada en el asiento del copiloto con los pies en el tablero de mandos. Mientras tanto, mi madre permanecía inconsciente en el asiento trasero. Incluso dormida, parecía estar en guardia, como si se fuera a despertar en cualquier momento y ponerse a dirigir el tráfico.

– Más de prisa -le repetí a Steven mientras le daba un toque en el hombro-. Adelanta al niño en bicicleta.

Steven se encogió del hombros.

– No toques nunca al conductor. Y aparta tus sucios pies de mi tablero -dijo.

Sacudí un poco los pies. A mí me parecían bastante limpios-

– El tablero no es tuyo. Por si no lo sabes, pronto será mi coche.

– Si tramitas tu licencia algún día. A la gente como tú no se le debería permitir conducir -se burló.

– Eh, mira -dije señalando la ventanilla-. ¡Ese sujeto en la silla de ruedas acaba de rebasarnos!

Steven me ignoraba, así que empecé a juguetear con la radio. Una de mis partes favoritas de ir a la playa eran las emisoras de radio. Las conocía tan bien como las de casa y escuchar la Q94 me hacía sentir que había llegado de verdad, que realmente estaba en la playa. Encontré la emisora que más me gustaba, la única que ponía de todo, desde música pop, pasando por los clásicos, hasta hip-hop. Tom Petty cantaba Free Fallin’ y yo entonaba a coro: «She’s a good girl, crazy ‘bout Elvis. Loves horses and her boyfriend too».

Steven alargó el brazo para cambiar de emisora y yo se lo aparté de un manotazo.

– Belly, tu voz hace que tenga ganas de hundir el coche en el océano -dijo Steven finjiendo dar un volantazo a la derecha.

Me puse a cantar aún más alto, despertando a mi madre, y ella también empezó a cantar. Las dos teníamos una voz terrible y Steven negó con la cabeza al estilo «Steven el indignado». No soportaba que lo superáramos en número. Eso era lo que más le molestaba del divorcio de nuestros padres, ser el único hombre y no tener papá para ponerse de su lado.

Cruzamos la ciudad despacio y, aunque acababa de burlarme de Steven justamente por eso, en realidad no me importaba. Me encantaba ese viaje, ese momento. Ver la ciudad de nuevo, la Barraca del Cangrejo de Jimmy, el Putt Putt y todas las tiendas de surf. Era como volver a casa después de estar lejos mucho, mucho tiempo. Aquel momento encerraba un millón de promesas de lo que podía llegar a ser ese verano.

Extracto de El verano en que me enamoré, de Jenny Han.

el verano

El verano en que me enamoré, de Jenny Han, está disponible en librerías y tiendas en línea bajo el sello Destino.

Transatlántico, de Colum McCann

La casita estaba a orillas de un lago. Ella oía el viento y la lluvia azotar la superficie infinita del agua, sacudir los árboles y abrirse paso entre la hierba.

Empezó a levantarse muy temprano, antes incluso que los niños. Era una casa que valía la pena escuchar. Ruidos extraños en el tejado. Al principio imaginó ratas correteando sobre las tejas de la pizarra, pero no tardó en descubrir que eran las gaviotas, que sobrevolaban la casa y dejaban caer ostras sobre el tejado para romper las conchas y abrirlas. Pasaba por las mañanas, sobre todo, y algún que otro anochecer.

Primero dejaban escapar un sonido metálico, luego las conchas rebotaban mudas antes de tintinear tejado abajo hasta caer rodando en la hierba crecida manchada de cal.

Cuando la concha caía de punta se abría enseguida, pero si caía de lado no había manera de que se rompiera: se quedaba allí tirada, artefacto por explotar.

Las gaviotas se abalanzaban acrobáticas sobre las conchas rotas. Con el problema del hambre temporalmente resuelto, volvían a alejarse hacia el agua batiendo las alas, escuadrones de azul y gris.

Y al poco las habitaciones iban desperazándose, ventanas y armarios y puertas que se abrían, y el viento que llegaba del lago y empezaba a rondar por la casa.

Extracto de Transatlántico, de Colum McCann.

Transatlántico

Transatlántico, de Colum McCann, está disponible en librerías y tiendas en línea bajo el sello Seix Barral.

10 tips para elegir tu próximo libro

Hoy en día, la oferta de libros es abrumadora. Cada semana se publican decenas o hasta centenas de libros diferentes, y no es tarea fácil elegir un título entre tantas propuestas.

Una de las consecuencias de esta gran oferta de libros es que muchas veces elegimos un título que, al final, no nos gusta y no terminamos de leer. ¿Y por qué pasa esto? Porque no sabemos escoger.

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Para ayudarte en esos complejos momentos, aquí te compartimos una sencilla guía para que puedas elegir con más precisión los libros que realmente van con tus intereses y tu situación personal, es decir, los libros que sí vas a leer. Te garantizamos que así tu biblioteca estará conformada sólo por libros a los que querrás volver una y otra vez.

1. Fuente de los libros: Los tres grandes grupos en los que se clasifican los libros leídos son: Los que se compran, los que se reciben como regalo y los que se sacan prestados de las bibliotecas públicas o de amistades. Aproximadamente el lector compra el 40% de los libros que lee, recibe como regalo el 30% y como préstamo otro 30%. Tendremos que elegir cual de estas fuentes es la que queremos en el momento.

librería

2. Objetivo de la lectura: Cuando se decide ir a la biblioteca pública o a la tienda de libros, lo primero que hay que hacer es preguntarse si la decisión de pedir prestado un libro o comprarlo es para tener una satisfacción en su lectura, si es para formarse en alguna materia, es cuestión de resolver algún problema de trabajo o es para ir haciendo el contenido de la biblioteca de la casa. Hay más divisiones de la decisión pero estas suelen las principales.

3. Disponibilidad de los títulos: Cada año se publican en español aproximadamente 120 mil diferentes títulos, lo que hace un inventario de millones de libros que se pudiera escoger, aunque esta cifra se verá reducida a las existencias de las bibliotecas o tiendas donde vaya a buscarlos.

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4. Clases de libros: Habrá que elegir el formato preferido del libro, si tiene cubierta dura, blanda o es de bolsillo. Con letra grande y letra normal. Con ilustraciones y sin ellas. En cintas para escuchar. En videos o DVD. Electrónicos en computadora. Y sin olvidarnos del precio y presupuesto que tengamos (gratuito en el caso de las bibliotecas).

5. Clasificación temática: Los contenidos de los libros se clasifican en las diferentes secciones principales y de acuerdo con un sistema internacional aplicable en las bibliotecas o tiendas. Podemos elegir entre Biografías, Negocios, Niños, Autores Clásicos, Computadoras, Cocina, Ficción, Salud, Autores Hispanos, Historia, Como Hacer, Padres, Referencia, Religión, Romance, Autoayuda y muchos más. A su vez estas secciones suelen estar subdivididas en más temas y clasificadas por autores. Dependiendo del objetivo deseado de la lectura, así serán las secciones a las que vaya a buscar los títulos.

librero raro

6. Elección del autor: Si por ejemplo estuviéramos buscando entretenimiento o distracción y deseando leer una novela o un ensayo, empezaríamos a buscar en los autores que conocemos se acomodan mejor a nuestro gusto, cual está de moda, cual ha tenido una buena crítica, cual ha recibido un premio importante, cual tiene un Best Seller o cual escribe con el estilo y en los temas que más nos gustan.

7. Características del libro: Con el libro en la mano, podemos comprobar el título para hacernos una idea del tema. Después mirar el número de páginas, tamaño de la letra y las otras características del formato comentadas anteriormente. En los libros electrónicos se puede poner determinadas palabras claves para ver como las desarrolla, además de conocer el número total de palabras, frases y su longitud, etc. Conviene leer el resumen de la portada posterior y las críticas que tenga. También mirar los otros títulos publicados por el mismo autor, así como su biografía. El año de edición es muy importante en algunas ocasiones, pues el escritor va mejorando con el paso de los años y el número de libros escritos. Además de esta forma podemos saber cuan actual es el libro sobre todo cuando no se trata de una novela.

libro con flores

8. Lectura preliminar: Leyendo el índice, prólogo y primeras líneas tendremos una visión clara de lo que es el libro y de lo que puede aportar, bien sea distracción o conocimientos. Si el escritor no puede atraernos en las primeras líneas es muy posible que tampoco pueda en las siguientes.

9. Siguientes lecturas: Hay un gran porcentaje de libros comprados o prestados que no son leídos la primera vez. Por ejemplo muchos de los que provienen mensualmente de los Club de Lectura y los Best Seller que se compran por impulso debido a la publicidad y por estar a la moda. Incluso muchos los empezamos y los dejamos al poco tiempo, por no mantenernos la atención o haber cambiado de objetivo. A estos podemos volver más tarde y darles otra oportunidad. Una de las ventajas de las bibliotecas es que podemos sacar prestados un buen número que han superado todas las cuestiones anteriores a sabiendas que no todos los vamos a terminar.

10. Estadística personal: Debemos de mantener un historial de que libros nos han gustado más o menos, para compararlo con los próximos, o incluso para volverlos a leer. Se puede disfrutar lo mismo de un libro la primera vez que se lee como las posteriores. Cada vez sacaremos del libro algo diferente.

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